jueves, 27 de octubre de 2011

PANELLETS

Hoy nos hemos dado un buen tute en el gimnasio. El día ha sido lluvioso y nuestro instinto de hormiguita nos ha motivado a hacer PANELLETS, calentitos en casa.
Como las hormiguitas guardan una buena alacena. No hemos tenido problema. Teníamos todos los ingredientes. Los hemos elaborado con una masa dulce hecha con azúcar, almendra cruda molida, huevo y ralladura de limón, para que tenga una textura más esponjosa. Por el exterior los hemos recubierto de clara de huevo, que hace de adherente de los piñones. También según la inventiva o los gustos de cada uno, se pueden hacer de diferentes formas y sabores. Para terminar, los hemos puesto en una bandeja, los hemos horneado y listo.
¡Riquísimos!  y  ¡baratísimos!, que en estos tiempos de crisis es importante tenerlo en cuenta.
Por cierto, los piñones, nos han salido gratis. Salimos un día a pasear por el bosque y recogimos unas piñas secas. Las rompimos, sacamos los piñones (las manos llenas de resina), los partimos uno a uno (algún que otro golpe en los dedos), los pelamos y los guardamos.
Ya veis. Con trabajo y ganas de hacerlo, Cada uno puede disfrutar en su casa de un postre exquisito y a buen precio. Por los quilos no os preocupéis, ya los bajaréis en el trabajo o en el gimnasio.

Ejemplo de productividad

Por si queda todavía alguien que no la conozca, transcribo la famosa historia de la competición de remo. Se dice que es apócrifa, pero que en cualquier caso refleja fielmente el funcionamiento de muchas empresas españolas....

"En el 2003 se celebró una carrera de remo entre empleados de una empresa japonesa y empleados de otra española.
Se dio la salida y los japoneses empezaron a destacar desde el primer momento, llegando a la meta con una hora de ventaja sobre el equipo español.
La dirección de la empresa española analizó las causas de tan amarga derrota y advirtió que la derrota se debía a una argucia táctica del equipo japonés, que estaba compuesto por 10 remeros y un jefe de equipo, mientras que la tripulación española la componían 10 jefes de equipo y un remero. Por ello se decidió adoptar las medidas adecuadas.

En 2.004, la tripulación japonesa llegó dos horas y media antes que la española.
La Dirección se volvió a reunir y, tras un sonoro rapapolvo a la Gerencia, concluyeron que los japoneses habían repetido estrategia: (10 remeros y 1 jefe de equipo) mientras que la innovadora tripulación española, remozada tras las eficaces medidas tomadas el año anterior estaba compuesta por:
  • 1 jefe de equipo,
  • 2 asesores a gerencia,
  • 7 jefes de sección
  • 1 remero.
Tras encargar un estudio a un equipo de sesudos asesores, la conclusión de la dirección fue unánime: "El remero es un incompetente".
En el 2.005 tras encargar una innovadora trianera al departamento de nuevas tecnologías, la ventaja de los japoneses fue de cuatro horas. El equipo directivo reunido para analizar las causas del nuevo desastre comprobó que el equipo nipón había optado por la ya tradicional formación (1 jefe de equipo y 10 remeros), mientras que el español, tras una auditoría externa y el asesoramiento especial del departamento de Organización, optó por una formación mucho más vanguardista:
  • 1 jefe de equipo,
  • 3 jefes de sección con plus de productividad,
  • 2 auditores de Arthur Andersen y
  • 4 vigilantes jurados que no quitaban ojo al único remero de la tripulación, al que habían amonestado y castigado quitándole los pluses e incentivos tras el fracaso del año anterior.
Tras varias horas de reuniones, se acordó que, para la regata del 2.006, el remero sea un becario o en su defecto, una contrata externa, «ya que, a partir de la vigesimoquinta milla, se ha venido observando cierta dejadez en el remero de plantilla, actitud que roza el pasotismo al llegar a la línea de meta."


Resumiendo, más trabajo y menos echarle las culpas o el muerto a "otros" y leerse el cuento de "La hormiga y la cigarra" Spanish version, que circula estos días por Internet que, bien entendido aclara mucho las cosas.