miércoles, 6 de marzo de 2013

Recordar antes de "invertir"


Sir John Templeton – fundador de la organización Templeton – es considerado como uno de los inversores más sensatos y respetado del mundo. 
La revista Forbes lo describió como "el decano de las inversiones globales", y "uno de los más exitosos administradores de inversiones de la historia."
No hay recetas mágicas para nada en la vida, pero pensar antes de actuar y conocer los sectores en los que deseemos actuar ayudan a tener éxito en cualquier inversión que deseemos abordar, y no me refiero a inversiones económicas.
Parece que Sir Templeton siguió estos principios en su dilatada y exitosa carrera como inversor:

1. Invertir para obtener una rentabilidad real
El verdadero objetivo de cualquier inversor a largo plazo es lograr el máximo retorno absoluto o rentabilidad real después de pagar impuestos. El dinero se puede ganar trabajando y también haciendo que trabaje por nosotros. Comprar una acción en bolsa no es más que prestar dinero a una empresa para que contrate profesionales, compre productos y proporcione otros productos con valor añadido o servicios para la comunidad, con un beneficio. Parte de este beneficio es lógico que le corresponda al inversor que ha arriesgado su capital en la empresa.

2. Mantener la mente abierta
Nunca escojas de forma permanente un tipo de activo o un método de selección.
Trata de ser más flexible, tener una mente abierta y ser más escéptico. Los mejores resultados a largo plazo sólo se logran cambiando los tipos de instrumentos con una gestión activa, comprando títulos de buenas empresas que no están de moda (cotizan por debajo de su valor real) y vendiendo los que lo están (cotizan por encima de su valor real). Por eso mismo no sirve de nada que alguien te de un consejo puntual, por muy bueno que este sea. Lo que es bueno para hoy, dejará de serlo cuando cambien las circunstancias del mercado en el que se desarrolla tu inversión.

3. Nunca seguir a la mayoría
Si compra el mismo tipo de instrumentos financieros que otra gente (vas a remolque de la moda), obtendrás los mismos resultados que ellos.
Es imposible lograr un rendimiento superior a menos que hagas algo diferente a la mayoría. Suele ser mejor ir a contracorriente de la masa: Comprar cuando otros estén vendiendo desesperadamente y vender cuando otros estén comprando eufóricamente. Esto parece fácil pero no lo es en absoluto. Requiere una fuerte disciplina para mantener la creencia en tus conocimientos y estudios previos y a cambio suele pagar la mayor recompensa.
(Foto) Los indios provocaban estampidas para arrastrar a toda una manada de bisontes hacia el precipicio, sin gastar una sola flecha. Podemos asociar Indios a gobernantes y poderosos y  caballo, gritos, etc. a "seguir la moda" moda.

4. Todo cambia

Tanto los mercados bajistas como los alcistas son temporales. Aquí decimos “No hay mal que cien años dure, ni cuerpo que lo resista”. Todas las modas suelen ser pasajeras.
El precio de los activos vuelve a subir de uno a doce meses después de haber tocado su mínimo y viceversa. Si una industria o tipo de instrumento en particular se hace popular entre los inversores, esa popularidad siempre resultará ser transitoria y, cuando se pierde, puede no retornar por varios años.

5. Evitar las modas
Cuando algún método para seleccionar acciones se pone de moda, es el momento de cambiar. Demasiados inversores pueden estropear cualquier método de selección de acciones o cualquier fórmula para tomarle el pulso al mercado. Si haces siempre lo mismo, por muy bueno que sea, te copiarán y dejará de ser lo mejor. En todos los trabajos, hay que investigar siempre para mejorar los productos y los métodos para crearlos.

6. Aprender de los errores

Esta vez es diferente es una de las frases que más dinero ha hecho perder en la historia.

7. Comprar en épocas de pesimismo
Los mercados alcistas nacen del pesimismo, crecen con el escepticismo, maduran en el optimismo y mueren de euforia.
La época de máximo pesimismo es el mejor momento para comprar las buenas empresas que están infravaloradas, y la época de máximo optimismo, cuando todo se vende, todo el mundo se cree un Gordon Gekko y triunfan en las carteleras las películas de especuladores, es el mejor momento para vender.

8. Busque valor y precios bajos
Muchos inversores se centran en las perspectivas y las tendencias. Por lo tanto, se logra más rentabilidad buscando invertir en empresas con “valor”.
Es conocido el dicho entre los inversores que sólo un necio confunde valor y precio, por ello en los mercados bursátiles, el único modo de conseguir una ganga es comprar lo que la mayoría de los inversores está vendiendo (siempre que sea una empresa de con “valor”).

9. Buscar en todo el mundo
Para evitar tener todos los huevos en la canasta equivocada en el momento equivocado, todos los inversores deberían diversificar para tener menos volatilidad y más seguridad para nuestros ahorros. A menos que, caso altamente improbable, tengas un periódico impreso el año siguiente. ¿Os acordáis de la película “Regreso al futuro”?.
Tenemos la creencia de que es más factible invertir en empresas o negocios radicados en nuestro entorno próximo o que al menos publiquen información en nuestro idioma. Sin embargo, las TIC’s nos permiten buscar en todo el mundo y ello nos brinda la posibilidad de encontrar más y mejores oportunidades que al estudiar solamente nuestro entorno próximo.

10. Nadie lo sabe todo
Un inversor que piensa que tiene todas las respuestas, lo más probable es que ni siquiera entienda las preguntas. La seguridad absoluta no existe y por tanto siempre hay un riesgo a la hora de invertir en un negocio o en una relación. Salvo que dispongas de información privilegiada y la uses ilegalmente, claro.

Antes de tomar cualquier decisión de de entrar en un negocio, no viene mal recordar los “tips” de Sir Templeton, sobre todo si soléis confiar en los consejos de vuestro dinero en manos del director de la oficina bancaria, para que lo “invierta por vosotros” u os aconseje donde colocarlo. 
©JAS2013


En la película Wall Street, Gordon Gekko hace este discurso: “La codicia, a falta de una palabra mejor, es buena; es necesaria y funciona. La codicia clarifica y capta la esencia del espíritu de evolución. La codicia en todas sus formas: la codicia de vivir, de saber, de amor, de dinero; es lo que ha marcado la vida de la humanidad”.
Además a lo largo del film pronuncia estas frases:

·         Deja de ir tras el dinero vacío y empieza a producir algo con tu vida. Crea, en vez de vivir de lo que compran y venden los demás
·         El dinero es sólo algo que necesitas en el caso de que no mueras mañana
·         Un tonto y su dinero no están juntos mucho tiempo
·         Si quieres un amigo, cómprate un perro
·         Vas a tener la carrera de ejecutivo más corta desde aquel papa al que envenenaron
·         La ‘commodity’ más valiosa que conozco es la información
·         No soy creador de nada, yo poseo
·         No soy un destructor de empresas, ¡las libero!
·         Toda batalla es ganada antes de que se luche
·         Si tu enemigo está enfadado, irrítale, si estáis igualados, combate y si no, espera y recapacita.

Otros gurús han dicho frases memorables sobre finanzas. Algunas de estas frases pueden aplicarse a los mercados y otras a varias facetas de la vida. En cualquier caso nos harán reflexionar y quizás hasta sonreír...:
  • A menos que puedas ver tus acciones caer un 50% sin que te cause un ataque de pánico, no deberías invertir en el mercado bursátil.” Warren Buffett 
  • “El pánico causa que vendas en la baja, y la codicia causa que compres cerca de la cima.” Stan Weinstein 
  • “Hay muchas cosas en la vida más importantes que el dinero, ¡Pero cuestan tanto!” Groucho Marx. 
  • “Octubre. Este en uno de los meses donde es particularmente peligroso especular con acciones. Los otros son julio, enero, septiembre, abril, noviembre, mayo, marzo, junio, diciembre, agosto y febrero.” Mark Twain 
  • “Usted ni tiene razón ni se equivoca porque la muchedumbre discrepe con usted. Usted tiene razón porque sus datos y razonamientos son correctos”. Warren Buffet 
  • “Mi sueño es el de Picasso: tener mucho dinero para vivir tranquilo como los pobres.” Fernando Savater 
  • “Del mismo modo que no tenemos derecho a consumir riqueza sin producirla, tampoco lo tenemos a consumir felicidad sin producirla”. GEORGE BERNARD SHAW 
  • “El principal problema de éste mundo es que los tontos y los fanáticos siempre están seguros de ellos mismos, mientras que la gente inteligente anda llena de dudas”. BERTRAND RUSSELL 
  • No existe nada nuevo en Wall Street. No puede haberlo porque la especulación es tan vieja como las montañas. Cualquier cosa que suceda en el mercado hoy, ha sucedido antes y sucederá otra vez.Livermore. 
  • “El hombre medio no desea que le digan si el mercado es alcista o bajista. Lo que desea es que le digan, de forma específica, qué valor comprar o vender. Quiere algo por nada. No desea trabajar. Ni siquiera desea pensar”.Livermore. 
  • “En todo fracaso hay una oportunidad nueva”. 
  • “En Bolsa, los últimos duros que se los lleve otro”, y que razón tenía. 
  • ”Cuando las acciones de la competencia veas bajar, pon las tuyas a negociar” 
  • Lo importante no es saber sino tener el teléfono del que sabe. (anónimo) 
  • Cuando esperamos que ocurra lo inevitable, surge lo imprevisto. (John Maynard Keynes) 
  • Lo más fascinante del Value Investing es que el tiempo siempre juega a tu favor. (Francisco García Paramés) 
  • En bolsa la primera regla es no perder dinero y la segunda no olvidar la primera. (Warren Buffett) 
  • Un banquero es aquel que te da un paraguas cuando hace sol y te lo quita cuando llueve. (Mark Twain) 
  • Las cuatro palabras más peligrosas en la inversión son "Esta vez es diferente". (John Templeton) 
  • Octubre es uno de los meses particularmente peligrosos para especular en la bolsa. Los otros meses peligrosos son julio, enero, septiembre, abril, noviembre, mayo, marzo, junio, diciembre, agosto y febrero. (Mark Twain) 
  • Recuerde que el mercado de valores es maniaco-depresivo. (Warren Buffett) 
  • Aquellos que no recuerdan el pasado, están condenados a repetirlo. (George Santayana). 
  • Yo no doy consejos de inversión porque los tontos no los siguen y los listos no los necesitan. (John Davidson Rockefeller) 
  • Cuando la música pare, las cosas se complicarán, pero mientras suene tienes que levantarte y bailar. (Chuck Prince) 
  • Solo el necio confunde valor y precio. (Antonio Machado) 
  • Un estudio económico generalmente revela que el mejor momento para comprar algo es el año pasado. (Marty Allen) 
  • Lo que no nos mata nos hace más fuertes. (Fiedrich Wilhelm Nietzsche) 
  • Los mercados alcistas nacen en el pesimismo, crecen en el escepticismo, maduran en el optimismo y mueren en la euforia. (John Templeton) 

  • · El único inversor que no debería diversificar es aquel que acierta el 100% de las veces. (John Templeton) 
  • Lo que el hombre sabio hace al principio, el tonto lo hace al final. (proverbio) 
  • En demasiadas empresas, el jefe lanza la flecha para luego, rápidamente, pintar la diana alrededor de donde fue a parar. (Warren Buffett) 
  • Si en el mercado hay más tontos que papel, la bolsa sube. Si hay más papel que tontos, la bolsa baja. (André Kostolany) 
  • Cuando mi limpiabotas invierte en bolsa yo lo vendo todo. (John Davidson Rockefeller) 
  • Hay mucha gente sabia gracias a la ignorancia de los demás. (anónimo) 
  • Las tormentas hacen que los árboles tengan raíces más profundas. (anónimo) 
  • El precio es lo que pagas. El valor es lo que recibes. (Warren Buffett) 
  • Lo que no puede ser, no puede ser y además es imposible. (Charles-Maurice Talleyrand) 
  • En teoría no hay diferencia entre teoría y práctica, pero en la práctica sí que la hay. (Jan L.A. van de Snepscheut) 
  • No critiques a tus enemigos, que a lo mejor aprenden. (Juan Goytisolo) 
  • El momento más beneficioso para ser un inversor de valor es cuando el mercado está cayendo. (Seth Klarman) 
  • Algunos de los mejores momentos de la vida son errores. (Película ‘PayCheck’) 
  • Si los mercados fueran eficientes, yo estaría pidiendo caridad en la calle. (Warren Buffett) 
  • Cuanto peor parece la situación, menos esfuerzo es necesario para cambiarla y mayor potencial de ascenso posee. (George Soros) 
  • Los que dicen que algo es imposible no deberían molestar ni interrumpir a los que lo están haciendo. (Thomas Edison) 
  • Un mercado emergente es aquel del cual no puedes emerger en caso de emergencia. (Richard Steinberg) 
  • La bolsa baja en ascensor peso sube por la escalera. (anónimo) 
  • Las opiniones son como los culos, cada uno tiene el suyo. (Clint Eastwood) 
  • Si tiene un minuto le diré cómo ganar dinero en el mercado bursátil. Compre con precios bajos y venda con precios altos. Si tiene 5 ó 10 años le diré cuándo los precios están bajos y cuándo están altos. (Jesse Lauriston Livermore) 
  • Me fío más de alguien que duda que de alguien que está seguro. (anónimo) 
  • Un inversor que tiene todas las respuestas ni siquiera entiende las preguntas. (John Templeton) 
  • A menos que usted pueda mirar su inversión caer en un 50% sin impulsos de pánico, usted no debe estar en el mercado de valores. (Warren Buffett) 
  • Compra el rumor, vende el hecho. (anónimo) 
  • La razón puede hacernos perder el juicio. (anónimo) 
  • No siga mis pasos porque, aún en el caso de que acierte al comprar, usted no sabrá cuándo vendo. (Peter Lynch) 
  • Como no sabían que era imposible lo hicieron... (anónimo) 
  • No me deis consejos que ya sé equivocarme yo solo. (Napoleón Bonaparte) 
  • La bolsa es un juego que consiste en ir pasando de unos a otros una cerilla encendida, hasta que llega a uno que se quema los dedos. (John F. Kennedy) 
  • Somos todos muy ignorantes, lo que ocurre es que todos no ignoramos las mismas cosas. (Albert Einstein) 
  • Todos los traders cometen errores sin embargo los grandes limitan los daños. (anónimo) 
  • El principal problema del trading está en el desarrollo de un sistema de reglas para gestionar algo que es completamente imprevisible. (Anthony Warren) 
  • Mantén una opinión sobre lo que va a hacer el mercado, pero no decidas sobre lo que hará. (Bernard Baruch) 
  • No debemos dejar de conducir por el hecho de que podemos tener un accidente. Siempre debemos conocer nuestros riesgos potenciales y actuar con precaución. (Charlie F. Wright) 
  • Lo importante no es ganar sino hacer perder a los demás. (anónimo) 
  • Lo que en la bolsa saben todos, no me interesa. (André Kostolany) 
  • Nunca invierta en negocios que no pueda entender. (Warren Buffett) 
  • El mejor momento para vender una empresa excelente es nunca. (Philip Fischer) 
  • Las dos grandes fuerzas que mueven los mercados son la codicia y el miedo. (anónimo) 
  • El destino de un inversor lo marca su estómago, no su cerebro. (Peter Lynch) 
  • Desconozco la dirección del mercado durante los próximos 2.000 puntos pero lo que tengo claro es que los próximos 20.000 serán hacia arriba. (Bill Miller) 
  • Resulta extremadamente difícil, sobre todo para un especulador relativamente inexperto, actuar y comprar en contra del consenso general cuando los colegas, los amigos, los medios de masas y los expertos aconsejan vender. (André Kostolany) 
  • Es mejor comprar una compañía maravillosa a un precio justo que una compañía buena a un precio maravilloso. (Warren Buffett) 
  • Nunca sabemos qué operaciones serán ganadoras, el problema surge cuando pensamos que lo sabemos. (Amos Barr Hostetter) 
  • Con el dinero sucede lo mismo que con el papel higiénico: cuando se necesita, se necesita urgentemente. (Upton Sinclair) 
  • Una diversificación amplia sólo es necesaria cuando el inversor no entiende lo que está haciendo. (Warren Buffett) 
  • No hay que seguir los acontecimientos con los ojos, sino con la cabeza. (André Kostolany) 
  • Quien quiera saber, que compre un viejo. (anónimo) 
  • Quien invierta en acciones no debería estar demasiado preocupado por las erráticas fluctuaciones en los precios del valor, puesto que a corto plazo el mercado de acciones se comporta como una máquina de votar, pero a largo plazo actúa como una báscula. (Benjamin Graham) 
  • Gran parte del éxito se puede atribuir a la inactividad. La mayoría de los inversores no pueden resistirse a la tentación de comprar y de vender constantemente. (Warren Buffett) 
  • Un secreto raramente mencionado sobre el trading en futuros es que la mayoría de lo que compone el análisis técnico, no funciona. Si usted hace la prueba, lo verificará. (Bruce Babcock) 
  • Lo que parece obvio, es obviamente erróneo. (Paul Tudor Jones) 
  • Si no sientes miedo en el momento de comprar es que estás comprando mal. (anónimo) 
  • El optimismo es el enemigo del comprador racional. (Warren Buffett) 
  • La planificación a largo plazo no es pensar en decisiones futuras, sino en el futuro de las decisiones presentes. (Peter Drucker) 
  • El grupo de aquellos capaces de pensar por sí mismos, se encuentra a años luz de aquellos que no lo son. (Ludwig von Mises) 
  • Si tienes razón nadie se acuerda; si te equivocas, nadie lo olvida. (anónimo) 
  • Sé temeroso cuando otros son codiciosos y sé codicioso cuando otros son temerosos. (Warrant Buffett) 
  • Una de las razones por la que el seguimiento de tendencia funciona es porque no tratas de conocerlo todo. Intento seguir la tendencia y no predecir los movimientos del mercado." (Kevin Bruce) 
  • Los mercados alcistas no tienen resistencia y los bajistas no tienen soporte. (Ed Downs) 
  • Si te falta coraje para empezar, ya has terminado. (anónimo) 
  • El pánico causa que vendas en el bajón, y la codicia que compres cerca de la cima. (Stan Weinstein) 
  • Mientras más absurdo sea el comportamiento del mercado mejor será la oportunidad para el inversor metódico. (Warren Buffett) 
  • Los mercados pueden mantener su irracionalidad más tiempo del que tú puedes mantener tu solvencia. (John Maynard Keynes) 
  • Cada vez que se realiza una transacción de bolsa alguien está equivocado. (anónimo) 
  • El dinero se hace cuando la sangre corre por las calles. (Warren Buffett) 
  • El momento de comprar es cuando la sangre corre por las calles. (Edmond Rothschild) 
  • El dinero lo ganan aquellos que con paciencia y fina observación van detrás de los que lo pierden. (Benito Pérez Galdos) 
  • Los mismos que se ríen de los adivinos se toman en serio a los economistas. (anónimo) 
  • Asumiendo que los fundamentales de una acción no cambian, cuanto menor sea la cotización, mayor el valor implícito de dicha acción desde el punto de vista fundamental. Esto nos lleva a aumentar el tamaño de nuestra posición compradora a medida que el precio va en contra nuestra. (Jack D. Schwager) 
  • El dinero esta hecho para descartar lo obvio y apostar a lo inesperado. (George Soros) 
  • Nunca puedes estar seguro de que algo sucederá hasta que el gobierno lo desmiente. (programa británico de televisión) 
  • Prefiero tener todos todos mis huevos en una canasta y vigilar esa canasta de cerca. (Warren Buffett) 
  • Los mercados nunca están equivocados, las opiniones a menudo si. (Jesse Lauriston Livermore) 
  • Los economistas son pesimistas, han predicho nueve de las últimas tres recesiones. (Barry Asmus) 
  • No voy a buscar las acciones que yo creo van a subir más, sino aquellas que la gente crea que subirán más, porque ellos son los que compran y los que provocarán esas subidas. (John Maynard Keynes) 
  • Los analistas son historiadores que predicen el pasado. (Craig R. Barrett) 
  • Sólo cuando baja la marea se sabe quién nadaba desnudo. (Warren Buffett) 
  • De aquel que opina que el dinero puede hacerlo todo, cabe sospechar con fundamento que será capaz de hacer cualquier cosa por dinero. (Benjamín Franklin) 
  • Utilicé el análisis fundamental durante nueve años y me hice rico utilizando el análisis técnico. (Marty Schwartz) 
  • Compre cuando el resto esté vendiendo y mantenga hasta que el resto empiece a comprar. Esto no es sólo un slogan barato, es la verdadera esencia de la inversión. (J. Paul Getty) 
  • De vez en cuando, el mercado es algo tan estúpido que quita el aliento. (Jim Cramer) 
  • Quiero formar parte de empresas tan excelentes, que incluso un tonto pueda ganar dinero. (Warren Buffett) 
  • Inflación es cuando pagas quince euros por el corte de pelo de diez euros que te solía costar cinco euros cuando tenías pelo. (Sam Ewing) 
  • Los paraguas hay que comprarlos cuando no llueve. Cuando empieza a caer agua son caros y probablemente te habrás mojado. (Jacobo Zarco) 
  • Wall Street es el único lugar del mundo dónde se va en Rolls Royce para dejarse aconsejar por los que llegan en metro. (Warren Buffett) 
  • Yo era un ser humano antes de convertirme en un hombre de negocios. (George Soros) 
  • El mercado está lleno de personas que entienden de bolsa sin hacerse ricos. (MRDV, Unience) 
  • Comprar acciones es como ir al casino, pero sin el servicio del bar. TED ALLEN . 
  • Lo que separa al 1% del otro 99% es una cantidad ingente de esfuerzo. Es perseverancia. Te tiene que gustar hacerlo. TOM BALDWIN 
  • Es más importante querer ganar dinero que querer ’Tener razón’. Las personas que quieren tener razón todo el tiempo tienen miedo de tomar decisiones. Las personas que quieren ganar dinero están dispuestas a cambiar sus decisiones para coger lo que el mercado vaya a darles. 
  • Siempre en nuestra vida hay algo que desearíamos no haber hecho. Pero ya está hecho. Y lo único que podemos hacer es sacar de este error las consecuencias más favorables. UGO BETTI 
  • Con el dinero sucede lo mismo que con el papel higiénico: cuando se necesita, se
  • necesita urgentemente. 
  • VICTOR SPERANDEO La clave del éxito en el Tading está en la Disciplina Emocional. Si la inteligencia fuera la clave, habría mucha más gente ganando dinero en los mercados financieros. La principal razón por la que los individuos pierden dinero en los mercados financieros es que no cortan las pérdidas, ni dejan correr las ganancias. 
  • VINCENT T. LOMBARDI La diferencia entre una persona que tiene éxito y una que no lo tiene, no está en la falta de habilidades, o en la falta de conocimiento, sino en la falta de fuerza de voluntad y disciplina. 
  • VOLTAIRE Si alguna vez ven saltar por la ventana a un banquero suizo, salten detrás. Seguro que hay algo que ganar. 
  • WARREN BUFFETT En demasiadas empresas, el jefe lanza la flecha para luego, rápidamente, pintar la diana alrededor de donde fue a parar. 
  • WILL DURANT La Educación es un descubrimiento progresivo de nuestra propia ignorancia.
  • WILL ROGERS. No te jueges los cuartos; coge tus ahorros y compra unas buenas acciones que guardarás hasta que suban. Si no suben, no las compres. 
  • WILLIAM DELBERT GANN El agua tiende a su nivel. Se puede forzar este nivel mediante una Bomba de agua, aunque al dejar de bombear no se requiere ninguna fuerza para que el agua vuelva a su nivel natural. Las acciones y Commodities funcionan de la misma forma. 
  • Los tiempos y las condiciones cambian y debemos aprender a cambiar con ellos. La naturaleza humana no cambia, y esa es la razón por la que la historia se repite y las acciones se comportan de forma similar, año tras año en diferentes ciclos temporales. 
  • La ambición y las prisas no son buenas consejeras 
  • Lo bueno y lo malo no duran siempre. Nada perdura, tampoco el sufrimiento ya que todo cambia sin cesar 
  • Es común a todos los hombres de buena voluntad sentirnos defraudados de algunas de nuestras obras, y el que tengamos que empezar de nuevo, levantarnos una y otra vez, y repetir el sacrificio. 
  • Todo lo que nos pasa es mucho menos importante de lo que uno cree, hay una sola vida, pero dentro de esa vida hay muchas vidas, y ninguna tiene mucho sentido. 
  • El mejor consejo que una madre le puede dar a un hijo: disfruta de todo aquello que a ti te de placer, pero con cierta prudencia y nunca olvides la moderación.... y la templanza. 
  • Si algo te ofende eres cómplice. 
  • Regla de tres: No vemos las cosas "tal como son", sino "tal como somos". 
  • Llegar a una conclusión sin conocer todos los detalles es un error. 
  • Si no eres capaz de enamorarte de la vida estás más muerto que vivo. 
  • La vida es breve y no hay muchas oportunidades para ser feliz. 
  • Sea cual sea la situación nunca hay que perder la esperanza.

jueves, 28 de febrero de 2013

El poder de la «deuda»: Χρεοκρατία

En 1927 a Alexander Nahum Sack, especialista en leyes de la Rusia Zarista, se le ocurrió una idea brillante la “deuda odiosa”. Según él, una deuda podía calificarse de “odiosa” si se daban estos tres requisitos previos: 
1. El gobierno del país recibe un préstamo sin el conocimiento y la aprobación de los ciudadanos. 
2. El préstamo se destina a actividades no beneficiosas para el pueblo 
3. El prestamista está informado de esta situación pero se hace el tonto. 
Esta idea fue empleada por los Estados Unidos de América en 1898 cuando se anexionaron Cuba en la guerra hispano-cubana (no pagaron la deuda que los cubanos habían contraído con España por considerarla “ilegítima”). Ya en el siglo XXI, después de la guerra de Irak, convencieron a la comunidad internacional de que Saddam Hussein había malgastado el dinero de su pueblo y la deuda de los iraquíes podía considerar “odiosa” y por ello no estaban obligados a pagarla. Los acreedores internacionales rebajaron su deuda un 80%. USA, amparado en su estatus de potencia y policía mundial, cuando le ha convenido, ha empleado o influido en otros países y en numerosas ocasiones este principio. 

Una gran parte del dinero recibido en préstamo por “España” ha sido empleado en grandes obras de infraestructuras que ¿benefician? a un pequeño porcentaje de la población (clases ricas) y la gran deuda se ha cargado a todos los ciudadanos. La pagan todos los ciudadanos según su nivel de compras de bienes y servicios a través de los impuestos indirectos y aquellos contribuyentes que pagan impuestos directos (no todos los que deberían). Los ciudadanos de a pie utilizan sanidad, educación y servicios sociales que se están reduciendo cada vez más. La mayoría de la población no usa para nada el AVE con sus estaciones fantasma que nunca salen por la TV pero que existen. No usan los aeropuertos sin pasajeros. No usan grandes edificaciones incompletas o cerradas por falta de recursos. No usan grandes autovías y autopistas sin tráfico, financiadas y rescatadas con dinero público. No se benefician de grandes sumas de dinero en subvenciones agrícolas que reciben “terratenientes” que ni siquiera cultivan sus grandes extensiones y por tanto no dan trabajo a nadie. No han sido invitados a disfrutar del pastel de las comisiones ni nunca han recibido ningún sobre. Etc. Por desgracia, podríamos estar escribiendo durante horas. 
Para hacer frente a estas grandes deudas, el estado se ha endeudado más y más, atenazando cada vez más a las clases populares, que nunca podrán devolver la deuda que los diferentes gobiernos han suscrito en su nombre. 
Parece que los políticos gobernantes han actuado como dictadores irresponsables, engañando a la población con falsos indicadores de prosperidad presente (¡España va bien!, "Vemos brotes verdes"); permitiendo a los bancos y a los sicarios financieros que prestaran al país cantidades enormes de dinero que tarde o temprano sabían que serían imposibles de devolver y por tanto acarrearían una gran pobreza, principalmente a las clases baja y media de la población. 
Los gobernantes y también muchos ciudadanos actuaron como drogadictos enganchados al dinero fácil, cada uno a su nivel, y los bancos actuaron como camellos. Además, siempre ha habido mucha opacidad en las explicaciones de cómo se ha utilizado el dinero público. Siempre habido gran opacidad sobre las asesorías recibidas de entidades financieras internacionales, que frecuentemente han aconsejado sólo en su beneficio y en de los prestamistas. También ha habido opacidad sobre los “regalos” que presuntamente algunos partidos políticos, políticos y altos funcionarios recibían de grandes empresas (muchas veces radicadas en los países prestamistas) durante décadas, para obtener prebendas en la contratación de obras y servicios.
La deuda española puede que no sea inconstitucional, pero ¿Es ilegítima? 
¿Pensáis que los españoles podemos reclamar, conforme al Derecho Internacional, no pagar la parte de su deuda que sea “odiosa”? 
¿Qué se precisa para conseguirlo? 
Hay muchos compromisos nacionales urgentes pendientes de atender y los contribuyentes de los países prestatarios están cansados de prestarnos su dinero. Los ciudadanos españoles han recibido prestaciones inadecuadas al dinero que los gobiernos han pedido prestado. Parece que la gran cantidad de dinero que falta ha ido a parar a grandes empresas, bancos y élites dirigentes y burocráticas de los países prestatarios y del nuestro, que se han comportado como verdaderos agujeros negros sumiendo dinero insaciablemente. 

A pesar de ser un tema capital, nunca se ha aclarado públicamente mediante una auditoria realizada por profesionales desvinculados del gobierno, para el conocimiento de los ciudadanos: 
¿Qué tipo de deuda tiene España?, 
¿A cuando asciende exactamente esta deuda?, 
¿Cómo se ha llegado a tener esta deuda?, 
¿A quién se le debe exactamente este dinero? 
¿Es posible conocer todas las mentiras que presuntamente han dicho los gobernantes y las corporaciones y pedir las responsabilidades pertinentes? 
Sólo la presión popular sobre los gobernantes puede conseguirlo. Los ciudadanos suelen tener aversión a hablar de dinero, pero es necesario hacerlo en la sociedad en que vivimos. El dinero no da la absoluta felicidad, pero es necesario para llevar lo que en nuestro entorno consideramos una vida digna. 
Los jueces, académicos, organizaciones ciudadanas, etc. deben presionar para obtener respuestas a preguntas similares a estas. Los ciudadanos no podemos hacer sacrificios indefinidamente sin conocer el plan global. Ni los gobernantes ni nadie tienen derecho a desmantelar los sistemas de salud, educación y bienestar social, etc. por completo para pagar a los acreedores y salvar a los bancos, máxime cuando la deuda tiene visos de ser ilegítima. 
La historia siempre se repite: los contribuyentes a pagar y los poderosos a disfrutar, mientras la ley, sigue siendo ciega a las maquinaciones de los poderosos. 
Estamos inmersos en un campo de lucha ideológica, política y de clase. La deuda es el resultado. Pagar una deuda inmoral es inmoral y sólo cuando los ciudadanos actúen se podrá romper la red que nos esclaviza. 
©JAS2013 

Documentación para saber más sobre la “deuda odiosa” y “Deptocracia”:
http://en.wikipedia.org/wiki/Debtocracy
http://www.sinpermiso.info/textos/index.php?id=4966

martes, 26 de febrero de 2013

Parole, Parole

Votar a alguien para castigar a otro no soluciona nada. Es preferible reflexionar para saber dónde estamos, porqué hemos llegado a esta situación y que debemos hacer para mejorarla. Vivir engañado solo sirve para ocultar la realidad que día a día empeora la situación.


En Italia, la mayoría han votado “no” a los que apoyaban las políticas europeas. Para castigarlos han caído en las brasas (Berlusconi) con mucho humo (Grillo). ¡Vaya negocio!

En España el gobierno nos sigue mintiendo (siguen viendo brotes verdes, luz al final del túnel,  señales de incipiente recuperación y toda clase de variantes esotéricas para finales del segundo semestre). ¡TURURU! 
Es muy bonito adormecer los sentidos y creer los buenos vaticinios, pero no sirven de nada sino están fundados en datos reales. Es hacerse trampas al solitario. La realidad es que "la esfinge de Pontevedra" como algunos llaman a Rajoy, gusta de dejar que los problemas se arreglen solos o de esperar que sencillamente se diluyan o desaparezcan por aburrimiento.

Dentro de la legalidad, el dinero no crece de la nada, hay que generarlo (o imprimirlo, pero nosotros no tenemos el interruptor de la imprenta). Salvo la mayoría de los padres, nadie trabaja para crear riqueza y regalársela a los demás. Para muchos suena muy bien lo de no pagar los préstamos que engañados o irresponsablemente tomaron en su día. Los que lo así piensen o actúen, deberían pensar también en no pedir ayuda u otro préstamo en mucho tiempo, porqué habrán generado una gran falta de credibilidad en su capacidad para devolverlo y para respetar los acuerdos legales. Nadie en nuestro sano juicio lo haría. Eso va tanto para los estados como par los particulares.

La única forma de salir del atolladero es producir competitivamente para crecer y retornar las deudas. Esto significa sacrificio continuado durante años (gastar sólo lo imprescindible para sobrevivir y pagar las deudas hasta saldarlas). A veces es muy desagradable escuchar la verdad, pero es de avestruces taparse los ojos, los oídos o más aún, la mente para no verla. Todos deberíamos tenerlo claro. 

En el gran norte italiano, el sector productivo siempre ha ido bastante desligado de la política, pero, por desgracia, en España no pasa lo mismo. En España nos sobra gente corrupta, que robre, que evada impuestos (leyes y justicia rápida) que cobre sin trabajar o haciendo ver que trabaja. Nos sobran políticos que complementen su sueldo con sobres, que legislen en provecho de las oligarquías perjudicando al bienestar de los ciudadanos. En cambio necesitamos, como agua de mayo, políticos que legislen en bien de la comunidad,  que faciliten la labor a los emprendedores con proyectos y trabajadores que puedan desarrollarlos competitivamente para atraer inversores que los financien. 
Basta de lamentarse, el trabajo más productivo es el que sale de las manos de un individuo proactivoLo demás son “parole, parole, parole… Normalmente mi tengono sveglia mentre io voglio dormire e sognare… Non cambi mai, non cambi mai, non cambi mai”.  (palabras, palabras, palabras ... Normalmente me mantienen despierto mientras yo quiero dormir y soñar ... Nunca cambia, Nunca cambia, Nunca cambia.)

La historia siempre se repite, el problema es que la gente está tan anestesiada por la "propaganda" que no es consciente de ello. Escuchen la canción y piensen en lo que dice el hombre ( políticos) y lo que responde la mujer (ciudadan@).
¡Escuche, Escuchen!
©JAS2013

http://www.youtube.com/watch?v=U9jTs8WdgOQ 

La canción “Parole, parole” (música ligera de los años 70) muestra las lamentaciones del final del amor de la cantante y las mentiras que ha tenido que escuchar, mientras que el hombre simplemente habla. Ella reacciona a los cumplidos que le da, simplemente respondiendo «parole», dando a entender que no cree en las palabras que le dice el hombre. 

martes, 19 de febrero de 2013

EL CAOS EN LA ESCUELA

Siempre he procurado buscar tiempo para cultivar la mente, para disfrutar del placer de aprender, para preguntarme sobre los porqués de la vida, para mirar las cosas desde diferentes perspectivas y procurar entender esta sociedad enrevesada que hemos contribuido a formar entre todos.
Tan audaz como la rebelde muchacha de Londres… Tan fuerte como su maestro debía ser.
De joven siempre me habían fascinado las películas tipo “Rebelión en las aulas”, “El Club de los emperadores”, “El club de los poetas muertos”, etc., en las que un superprofesor daba clase a unos alumnos que aunque desaventajados, tenían el privilegio de asistir a las clases de un brillante profesor que conseguía, con su magia, dar un vuelco a sus vidas y convertirlos en hombres de provecho. Los alumnos me inspiraban una sana envidia y los profesores una gran admiración e intriga. Ojalá pudiera hablar con ellos y preguntarles por el secreto de sus maravillosas dotes pedagógicas, me decía.
Para mi desgracia, nunca encontré uno de esos extraordinarios profesores que me acompañaran por los huidizos y difíciles caminos del saber. Intenté aprender con los medios que en cada momento puede agenciarme y por suerte, nunca me faltó automotivación. Como es natural, siempre que hay que elegir, siempre hay que dejar algo atrás y nunca sabré como hubiera sido mi vida si… Tampoco importa. Cuando uno toma una decisión “razonada” con los medios y conocimientos de que dispone en ese momento concreto, esa es la mejor decisión que puede tomar. De nada sirve arrepentirse o preguntarse que hubiera pasado si hubiera tomado otra.
Volviendo al tema, lo que nunca he visto en mi entorno es que nadie consiga motivar a los demás para que cambien su comportamiento, como en esas películas tan emotivas, si ellos no quieren. Historias muy bonitas, pero poco realistas y muy teórico-utópicas. Me gustaría que alguien me contara alguna, si tuviera referencias.
Según Antoni Dalmases que ha escrito y publicado recientemente el libro “El caos a l’escola”, uno aprende sólo las cosas que le interesa aprender. No sirve de nada imponer cualquier aprendizaje a un joven o adulto. Sólo aprenderá bien, lo que le despierte interés. Por ejemplo, un juego multimedia cuanto más difícil es, más interés produce y no importa las horas que se tenga que pasar el joven delante de la pantalla intentando ganar al software. Cuanto más grande sea el reto, mejor. En cambio cualquier tarea escolar, aunque sea mucho más fácil que el juego, pondrá mil pegas o directamente se negará a hacerla.
Mi experiencia personal me confirma las opiniones del profesor Dalmases. Pienso que lo único que puede hacer alguien que tenga que enseñar, a un grupo de personas con motivación heterogénea por aprender, es encontrar algo que incentive la curiosidad de esas personas por aprender. En el caso de los jóvenes, si se consigue que esa actividad suponga un disfrute para ellos, se logrará que sigan aprendiendo de mayores durante toda su vida. A los que no se infecten de este virus, lo único que pueden hacer los maestros, es procurar que molesten lo menos posible, a los que si quieren aprender y rezar para que los contaminen lo menos posible con su desidia y desinterés.

Las escuelas no pueden enseñar y educar al mismo tiempo. Los niños deben llegar a la escuela educados desde sus familias y en ellas practicar, compartir, desarrollar y mejorar lo que han aprendido en casa.
Una persona que no tiene curiosidad e ilusión por aprender es muy difícil motivarlo para que lo haga. Si un niño no viene a la escuela educado y motivado por sus padres para aprender, es muy difícil conseguir enseñarle algo de provecho. Si un niño no ve en su casa que sus padres, tienen interés por aprender y observa en ellos comportamientos que den fe de esa importancia, difícilmente valorará la importancia del aprendizaje.
Recuerdo cuando era jovencito que todos los mayores eran super-buenos-conductores. Los hombres bebían coñac, champan y dos cubatas de postre y no tenía problema en ponerse a 100 al volante. ¡Controlaban como un "fitipaldi" cualquiera!. ¡Sin comentarios!.
Hace diez años se pusieron de moda las cámaras digitales y todo el mundo se puso a hacer fotos. Al no tener la necesidad de comprar un carrete e ir a la tienda para revelarlas todo era muy barato. Además era fácil. Cualquiera era capaz de apretar un botón y zas al instante veías la foto en la pantallita. Más tarde se podían enviar inmediatamente a un amigo o familiar mediante el móvil. Parecía que se acabaría el trabajo para los fotógrafos profesionales. Por suerte el trabajo de calidad y la excelencia siempre tendrá su mercado.
Ya hace bastantes años que se oye afirmar a la mayoría de los abuelos y a bastantes padres que sus nietos son unos informáticos excelentes. Muchas personas piensan que los niños de ahora nacen dominando el uso de las “nuevas tecnologías digitales”. En realidad no dominan nada, la mayoría se limitan a apretar botones. Imitando lo que ven hacer a sus padres, descubren que, apretando un botón determinado, la máquina (si dispone del software adecuado) les da una respuesta determinada que capta la atención de sus sentidos (colores y música). Parece que nadie se da cuenta que lo importante sigue siendo saber escuchar, leer y comprender, pensar y luego comunicar, escribiendo, hablando y dialogando.
Estas habilidades no las realizan las TIC’s ni el software, puesto que son sólo un medio y no la finalidad como parece que creen algunos. Algo similar a lo que pasa cuando la gente ve buenas fotos o vídeos. Lo primero que dicen es: “eso debe haberse hecho con una cámara muy buena (costosa)” o “Claro, lo pasan por el Photoshop y así salen tan bien”, como si por el sólo hecho de tener una cámara cara o tener el Photoshop instalado en el ordenador, estuviera todo resuelto. En algunos casos tal vez sea condición necesaria, pero nunca suficiente. Es como el que desea tener un “cuerpo 10” y piensa que basta con apuntarse a un club deportivo caro. Quien desee producir algo con “valor”, debe aprender, pensar, crear y mejorar continuamente por sí mismo.
Todos hemos visto correcciones de dictados o redacciones en que parecía verse más el rojo que el negro. No sé si actualmente hacen estos ejercicios en las escuelas, pero a tenor de lo que se ve en algunos comentarios y mensajes, la visión anterior sería de lo más normal. Eso aún contando con las herramientas de corrección que tienen las herramientas de escritura digital actuales. Pues bien, un psicólogo le dijo a un maestro que no corrigiera las redacciones con rotulador rojo, porqué traumatizaba a algunos niños. Parece que el mensaje subliminal que escondía el consejo era: “No les corrijas”, “no les muestres que no lo hacen bien”, “no les muestres que no todos son iguales ni aprovechan lo mismo tus enseñanzas”.
¿Qué tipo de ciudadanos queremos en nuestra sociedad?
¿Deseamos tener personas neutras, que no piensen más que en hacer dinero sin importar como; venerando la cultura del “Todo vale”, del pelotazo, de la corrupción, del enchufismo, etc.? Seguro que cierto tipo “lobbies de poder” prefieren tener personas que no piensen, porqué son más fácilmente domesticables. Basta con enseñarles a responder a determinados impulsos para conseguir sus objetivos (los de los grupos de poder claro). ¡Todos contentos y engañados!.
No sería mejor darles a los jóvenes la alimentación adecuada, no sólo física, sino también intelectual, para que se actúe socialmente con sentido común, decencia y corrección. Para que sean coherentes y eficaces, bien educados, tranquilos, felices, capaces de convivir en sociedad y aportar algo positivo a la misma.

Todos conocemos a personas muy maleducadas que han ido a escuelas carísimas y también a mucha gente que consideran maleducado o al menos políticamente incorrecto, al que dice abiertamente que el “rey va desnudo".



Sin confianza, sinceridad y seguridad en uno mismo y asertividad se pueden perpetuar los planes y creencias más estúpidas. Por miedo a que nos crean tontos no cuestionamos las injusticias y contradicciones de la sociedad actual. Esperemos cada vez más personas dejen de lado lo “políticamente correcto” y se atrevan a hablar claro y reclamar sus derechos y desenmascarar a los que se los niegan.
En estos tiempos, a pesar de que nuestros dirigentes nos repiten que tenemos más libertad de expresión de nunca, más democracia que nunca, más justicia que nunca, mas de todo que nunca, estamos envueltos en tantas sinrazones y barbaridades, que pueden secar el cerebro al más cuerdo. Sus políticas y “propogandas” hacen que se asuman como normales las arbitrariedades, irregularidades, tropelías y abusos varios. Que se consideren normales las desvergüenzas y la falta de orden y justicia y se admita como normal la difamación y la falta de respeto. Incluso que se tolere o explique la violencia que puede ir vestida con diversos ropajes.
Faltan personas instruidas, pero más aún se echa de menos mucha educación de la buena, de la que hace muchos años se daba en las familias, se acompañaba en las escuelas y se practicaba socialmente.

Ahora muchos enseñantes están cansados de que los políticos no les dejen realizar su trabajo; máxime cuando muchos de ellos tienen reducidos conocimientos sobre la materia y un nivel de formación general bastante deficiente.
El domingo anterior, el programa “Salvados” en la Sexta nos mostró una faceta de la educación finlandesa. Oyendo las explicaciones de una profesora autóctona y dos becarias españolas, me maravillaba de lo que contaban. Supongo que por la historia del estado finlandés, esa sociedad es más proclive a prácticas bondadosas y al empleo de la “buena fe”.
En España, la cultura de la picaresca y las actitudes hipócritas ya era retratada en novelas como el Lazarillo de Tormes en el siglo XVI. Mucho queda de esta cultura en nuestros días: Al más pillo se le llama listo. El más valorado no es el científico o el emprendedor que desarrolla excelentes productos o servicios y los comercializa con beneficios sino el que gana “kilos” revendiendo pisos o traspasando terrenos recalificados con algún soborno. Aquí se considera que lo malo no es robar, sino que te pillen. En la etapa escolar se sienten bien los que copian y aprueban y mal los que no han copiado y después de mucho trabajo, han suspendido o han aprobado con un cinquillo justo. ¡El mundo al revés! El sentido común y la corrección han perdido. ¡Esto es fatal!
Al contrario de Finlandia, en que se considera que la educación es un tema tan importante que está por encima de los politiqueos y que planifican a larguísimo plazo para el bien global de los individuos y de la sociedad, en España, pocos jóvenes han podido realizar todos sus estudios con un solo plan de educación. En Finlandia han pasado muchos gobiernos sin cambiar drásticamente el sistema educativo; en España casi cada gobierno ha hecho una ley nueva. Entre otras la LOGSE, inventada para esconder un problema social, no para mejorar la enseñanza.

Hay que tener claro si queremos que las escuelas sean “centros de estudio” o “centros de acogida”. ¡Las dos cosas a la vez no funcionan!
Los padres que quieren tener a sus hijos en un centro que les imparta una “buena formación académica” no los tendrán en un “centro de acogida” cualquiera. Ahora bien, ¿Qué entiende cada cual por “buena”?. Muchos padres desean una “buena escuela” que prepare a los jóvenes para desarrollar una profesión. Otros prefieren, por lo menos hasta los 16 años, que aprendan a pensar. Por ejemplo estudiando como pensaron, hablaron y escribieron los “mejores” desde la antigüedad hasta nuestros días.
Sea cualquiera la opción escogida, lo que estos padres no quieren es que sus hijos convivan con la “peña” que van al cole-instituto-centro de acogida a pasar el tiempo molestando-retrasando a los que si quieren aprender. Muchos alumnos aplicados les reclaman a sus profesores: “¡Hecha a este gamberro de una vez!”.

El profesor no puede, porque la ley no se lo permite, sin entender que la libertad de unos termina donde empieza la de los otros. Los que quieren aprender no tienen más remedio que aprender a tolerar a los que molestan y esperar a que se aburran y dejen de asistir a clase. Entonces será cuando podrán aprender eficazmente. Lo demencial del tema es que hay personas que no trabajan y molestan a los demás; van pasando de curso y otros que trabajan y se esfuerzan, a lo mejor se llevan peores notas que los que no están por la labor.
Este tipo de comportamientos… ¿Qué tipo de sociedad producirán?
Los límites del lenguaje de cada persona son los límites de su mundo. Cada uno debe esforzarse en aprender a leer y escuchar para entender el mensaje que se nos quiere transmitir. También es imprescindible aprender a escribir y hablar, porqué es fundamental para comunicarse con los demás.
En la escuela se dedica bastantes horas a enseñar cómo resolver raíces cuadradas o mínimos común denominadores y fuera de este ambiente académico, prácticamente nadie ha utilizado ni una sola vez estos conocimientos. En cambio, todo el tiempo que se dedique a aprender a hablar, leer y escribir bien es poco, porque es casi tan útil como el respirar. Una escuela es un ambiente lingüístico que, además, transmite conocimientos sobre lo que es la lengua y sobre lo que se puede hacer con ella. Ojalá algún día se entienda que para cualquier actividad, el dominio del lenguaje es imprescindible, porqué nuestras palabras y expresiones son un reflejo de nosotros mismos.
©JAS2013

miércoles, 13 de febrero de 2013

San Valentín

Mañana será el día de San Valentín y según la tradición anglosajona, las parejas de enamorados se hacen regalos para expresar su amor y cariño mutuamente.
En Catalunya es tradición que los enamorados celebren el día de Sant Jordi y se regalen rosas y libros en una fiesta que se celebra en día laborable; pero como casi todas las costumbres de los países anglosajones, la celebración de San Valentín cada vez más se va implantando en nuestro país. 
Mi abuelo siempre me decía que no era sensato luchar contra la corriente como una caña de bambú, porqué terminarías rompiéndote. Es más razonable dejarte mecer por ella como un junco y así podrás permanecer con tus pies firmemente anclados sin que la corriente te arrastre. Siguiendo su consejo, que estimo por lo menos razonable, a todos mis amig@s, os mando este pastel virtual para que podáis disfrutarlo con vuestras personas amadas, hoy o cuando os apetezca. 
Lo importante no es el día en sí, sino celebrar el amor y la amistad y hacer que florezca allá donde estemos. 

¡Feliz día de San Valentín! 

Por cierto…. 

¿Creéis que el destino tiene mucho o nada que ver para encontrar el amor? 

Pensad en ello, pero antes de responder, os propongo que veáis el cortometraje de animación titulado el “Hombre de papel”. Empezó en el tablero donde el artista creó la historia y dibujó los personajes y posteriormente se le dio volumen a las figuras y al paisaje urbano con ayuda del ordenador.  
Con un estilo minimalista blanco y negro, este corto cuenta la historia de un joven solitario, a mediados de siglo XX en la ciudad de Nueva York, cuyo destino da un giro inesperado después de un encuentro casual con una mujer hermosa, en su viaje matinal. 
Convencido que la chica de sus sueños se ha ido para siempre, tiene una segunda oportunidad cuando la descubre desde la ventana de su oficina, en una ventana del rascacielos de enfrente, al otro lado de la avenida. 
Con sólo su corazón, la imaginación y un montón de papeles para llamar su atención, sus esfuerzos no son rival para lo que el destino tiene reservado para él. 
Seleccionad pantalla completa, volumen alto, tomad un pañuelo por si acaso y a disfrutar… 



PD.- 
En esta era de Internet, estamos acostumbrados a ver “casi de todo” en la pantalla de nuestro ordenador, en nuestra tablet o incluso en la diminuta pantalla de nuestro Smartphone. Todo parece sencillo y natural y está a nuestro alcance con un solo clic. La mayoría no solemos ser conscientes, ni siquiera llegamos a imaginar, la gran cantidad de conocimientos y horas de trabajo que hay detrás de lo que tan fácilmente consumimos en la pantalla. Detrás de cada imagen, de cada pps que recibimos por correo electrónico o de cada publicación de Facebook que se compartimos, hay una persona o grupo que ha imaginado primero y ha creado después el producto para compartirlo con nosotros para nuestro aprovechamiento o disfrute.  
Hoy y desde aquí, doy gracias a todos mis amig@s por lo que habéis compartido conmigo, por vuestras fotos, vídeos, escritos, comentarios o un simple pero cálido "Me gusta", dando fe de que hay alguien detrás de la pantalla, allá donde esté, cerca o lejos, conocido personalmente o sólo a través de sus escritos e imágenes. Todos vosotros habéis contribuido a hacer mi vida más culta, interesante y agradable y espero haber correspondido también con mis aportaciones a esta comunidad. 

Si os ha gustado el vídeo y queréis conocer la idea, algunos dibujos originales, el estilo y el trailer del proyecto “Paperman” podéis ver http://www.youtube.com/playlist?list=PL3411EDE04EB0E5AC 

* Si os gusta la “animación” en el canal You Tube de Disney podéis encontrar más de 200 vídeos. 
http://www.youtube.com/user/disneyanimation/videos

jueves, 7 de febrero de 2013

El Estado: prescindible o privatizable

 (Conferencia de David Friedman)
Murray Rothbard, un importantísimo pensador libertario fallecido hace casi dos décadas dijo: “Las funciones del Estado se dividen en dos: aquellas que se pueden privatizar y aquellas que se pueden eliminar”. La frase es toda una declaración de los objetivos últimos del movimiento liberal-libertario y a muchos, ajenos a debate tan apasionante, puede parecerles un slogan absolutamente alejado de la cruda realidad que en estos momentos atraviesan España y otros países de la periferia europea. 

Sin embargo, mal haríamos en rechazar de plano el rico contenido que semejante sentencia posee, pues, pese a las apariencias, no podría estar más de actualidad. Al fin y al cabo, buena parte del estancamiento y de la depresión de nuestras economías actuales se debe a la hipertrofia de un Estado muy superior al que los debilitados sectores privados actuales se pueden permitir. Un paso imprescindible para la recuperación es el pinchazo de la burbuja estatal –el concienzudo adelgazamiento del gasto público– que nos permita evitar el colapso. Son muchos quienes, empero, rechazan instintivamente cualquier reducción del tamaño del Estado por cuanto han sentido en sus propias carnes cuánto les han perjudicado las que ya hemos experimentado. 

Y ciertamente, en tanto el Estado reparte numerosas rentas y prebendas, el quedarse sin alpiste (tras reventar la burbuja inmobiliaria que le nutría de fondos) va a obligar a que mucha gente salga escaldada y perjudicada (del mismo modo que el pinchazo de la mentada burbuja inmobiliaria dejó a promotores y obreros de la construcción sin ingresos). Ahora bien, dentro de las inevitables molestias que causará un Estado con menos pan y circo que ofrecer, es evidente que los recortes pueden efectuarse minimizando el malestar –o, mejor dicho, multiplicando el bienestar– de unos ciudadanos que, en su mayoría, son clientes cautivos de ese Estado. ¿Cómo? Pues aplicándonos la máxima anterior: primero, identifiquemos todas las funciones actuales del Estado que o son directamente dañinas (legislación anticompetencia, subvenciones a empresas, burocracias arancelarias, intromisión regulatoria en la legislación empresarial, barreras de entrada en los mercados, etc.) o del todo prescindibles (superestructura de cargos políticos o empresas públicas que son simples agencias de colocación y capturadoras de rentas) para, inmediatamente a reglón seguido, comenzar por lo privatizable (básicamente, todo lo demás). 

Dentro de lo privatizable habría que distinguir, a su vez, entre aquello que el mercado seguiría proporcionando sin un coste para el consumidor directo (privatizaciones de las televisiones públicas, de la moneda, de la promoción del deporte y de la cultura, etc.) y aquellos que inevitablemente se financiaría vía precios y que, por tanto, acarrearía un coste explícito para sus consumidores (privatización de la educación, de la sanidad, de las pensiones o de ciertas empresas públicas que proporcionen servicios de utilidad). Las primeras pueden trasladarse al mercado de inmediato y sin molestia alguna por parte de los ciudadanos (salvo de los grupos de presión que vivan de ellas). Las segundas, sólo si no se mantiene la asfixiante presión fiscal actual y si se liberalizan lo suficiente tales sectores como para que se oferten servicios con muy variopintas condiciones; en caso contrario, la privatización funcionará mucho peor de lo que podría e inevitablemente degenerará en rechazo social.

El problema de las privatizaciones parciales 
Al cabo, ¿qué cabe prever que suceda con un servicio al que el Estado le fija buena parte de sus contenidos y de su inflada estructura de costes en un contexto de altísima exacción tributaria de rentas? Pues que gran parte de su potencial clientela será simplemente excluida: los empresarios no podrán ofertar los bienes tan baratos y con tanta calidad como en realidad les sería posible (por culpa de las restricciones estatales de la oferta) y muchos consumidores no podrán pagar sus agigantados precios (por culpa de la rapiña fiscal de la demanda). Ejemplos los tenemos a patadas: el privado pero ultrarregulado sector eléctrico español, la privada pero hipersocializada sanidad estadounidense o una eventual educación privada que se siguiera sometiendo el corsé del sistema de enseñanza nacional en lugar de permitir su auténtica revolución vía múltiples modelos de negocio competitivos (educación online, homeschooling, cooperativas de profesores, enseñanza reglada en el interior de las empresas, combinación flexible de todas ellas en itinerarios formativos flexibles, etc.). 

En definitiva, si aspiramos a lograr una sociedad más libre y más próspera, tendremos inevitablemente que reformar nuestro Estado, tanto para reducir su tamaño cuanto para restringir su ámbito de actuación. Sin embargo, un empeño tan saludable encontrará, a buen seguro, un frontal rechazo de, primero, los receptores netos de rentas de ese Estado y, segundo, buena parte de unos contribuyentes netos que, paradójicamente, contemplan esta imprescindible reforma como una amenaza y no como una oportunidad para multiplicar su bienestar. A los aquéllos será difícil convencerles de que el Estado –su Estado­– tiene que retraerse (aunque no es imposible, pues las desventajas que les atañen pueden verse compensadas con ganancias en el resto de áreas privatizadas); a éstos, sólo si no afrontamos el proceso de reforma de manera lógica y coherente: primero, suprimir las funciones del Estado prescindibles (en especial, las contraproducentes); segundo, o simultáneamente, privatizar los cometidos útiles que el sector privado pueda desempeñar en estos momentos sin coste o a muy bajo coste para el consumidor; tercero, privatizar las funciones útiles y costosas de sufragar mientras se procede a su profunda liberalización y a una intensísima reducción de impuestos.

¿Qué serías en tu vida si el dinero no importara?

En nuestra sociedad impera una especie de adoración al consumo. Ello hace que mucha gente trabaje en algo que no le gusta demasiado o incluso aborrece, con el único fin de comprar cosas que no les sirven o al menos no son imprescindibles para vivir. La prueba es que no les hacen felices, más bien les llenan de preocupaciones y estres.

En todo el "primer mundo" o mundo desarrollado (¿?) como algunos le llaman, millones de personas viven su vida participando en la interminable “carrera de la rata” que definió Kiyosaki. Además, condicionan a sus hijos, familiares y semejantes para que también participen en ella y los critican y les hacen el vacío si no les siguen. Al mismo tiempo se quejan de que no les gusta el tipo de vida que llevan o de cómo funciona la sociedad, como se comportan los “demás” (políticos, banqueros, jefes, etc.) 
Poco cuesta echar la culpa a los demás, pero parece que cuesta mucho parar un momento y reflexionar sobre nuestra propia vida privada.
Algunos piensan que la única forma de poder vivir más feliz en un mundo mejor es trabajando uno mismo para cambiarlo.  

¡Haz un alto en tu camino! Apaga el móvil y la tele y vete a dar un paseo al parque.

No solo te pierdes el paisaje por ir tan rápido, también pierdes el sentido de adónde vas y por qué. ¡Detente y disfruta de la vida!. 
Cierra tus ojos y olvídate de todo por unos segundos. 
Detente en los detalles, en los aromas, en los sonidos... 
En aquello que llevas mucho tiempo ignorando; casi desde que dejaste de ser niño. 
Pregúntate sin hacerte trampas al solitario: ¿Estás disfrutando realmente de tu vida? 
¿Qué piensas que deberías hacer para mejorar su satisfacción? 

Alguna vez has cuantificado ¿Cuánto dinero hace falta ganar para vivir? 

Y si el dinero no importara tanto como la mayoría piensa. 

¿Qué es más importante: ganar dinero o ser feliz? 

¿Cuál se te antoja, para ti, es el mejor camino para ser feliz?: 

A.- Trabajar en lo que sea que te permita ganar dinero, para intentar tener muchas cosas y poder llegar a ser feliz algún día. 

B.- Utilizar tu tiempo haciendo algo que te guste y al disfrutar haciéndolo, mejorar día a día tus habilidades. Tal vez logres alcanzar la excelencia y al final, ello te reporte más dinero. 

Os animo a ver el siguiente vídeo basado en unos pensamientos de Alan Wilson Watts. Son sólo tres minutos y está subtitulado en castellano.
©JAS2013







http://www.youtube.com/watch?v=-yBA3tngqnA 

PD.-
1.- Alan Wilson Watts  fue un filósofo británico, así como editor, sacerdote anglicano, locutor, decano, escritor, conferenciante y experto en religión. Se le conoce sobre todo por su labor como intérprete y popularizador de las filosofías asiáticas para la audiencia occidental. 

Escribió sobre temas como la identidad personal, la verdadera naturaleza de la realidad, la elevación de la conciencia y la búsqueda de la felicidad, relacionando su experiencia con el conocimiento científico y con la enseñanza de las religiones y filosofías orientales y occidentales.

Las clases esenciales de Alan Watts (48 conferencias de Alan Watts (21h de audio)  ($34.99)) se pueden conseguir en http://www.simpletouchsoftware.com/products/alanwattsapp/

2.- TragedyandHope es un canal de YouTube dedicado a crear vídeos para informar, inspirar y ayudar a cambiar el estilo de vida. Allí podéis encontrar multitud de vídeos (gratis) para reflexionar y compartir.
http://tragedyandhopeproductions.org/

lunes, 4 de febrero de 2013

El Mundo va bien y España sigue yendo mal

El pasado diciembre de 2012, en Europa, solo se destruyeron 16000 puestos de trabajo. Esta fuerte desaceleración de la destrucción de empleo, es sin duda una buena noticia. La economía mundial crece globalmente, con sus locomotoras tirando.
Sin embargo en España, es un país en franca decadencia, donde el partido de la oposición está fuera de juego y donde la Corona está en entredicho por escándalos de corrupción.
Por si lo anterior fuera poco, hace pocos días se han vertido sobre el gobierno y sobre importantes dirigentes del partido que lo soporta, acusaciones de mantener un sistema de corrupción sostenido en el tiempo en el que se pagaban sobresueldos a los dirigentes de dicho partido.
La Secretaria del PP dando sucesivas versiones contradictorias a la prensa sin responder directamente a las preguntas de los periodistas. El Ministro de Hacienda, Sr. Montoro diciendo medias verdades, ocultando datos y facilitando que corruptos y defraudadores de impuestos “blanqueen” dinero negro o al menos permitiendo que “algunos” no paguen los mismos impuestos que otros españoles.

Esta bochornosa situación, de la que se han hecho eco todos los medios del mundo en sus portadas, trae dudas sobre la continuidad del gobierno y por tanto de las reformas y de la relativa estabilidad que tenía con la mayoría absoluta.
Nuestro tejido productivo está esquelético y necesita que alguien lo alimente. Los inversores están intranquilos y la confianza en la “marca España” brilla cada vez más por su ausencia y sin ella, la confianza de los inversores extranjeros, no es posible salir de ningún atolladero.
No tengo ni idea de que podrá ocurrir en las próximas semanas. ¿Habrá nuevos hechos o incluso elecciones anticipadas que traigan incertidumbre sobre la situación de España? Son preguntas que deben hacerse los inversores y todos los ciudadanos. Si no se hace nada y se deja que todo se siga pudriendo más aún, los de siempre, lo pasaremos cada vez peor.
El ver a los dirigentes del PP, cuando salen por Televisión en alguna rueda de prensa riéndose a carcajada limpia produce, no solo extrañeza. Con la que está cayendo y con la que les está cayendo -¿De qué se reirán?-. ¿Se han vuelto locos? ¿Son unos sinvergüenzas irresponsables que se ríen sin pudor de los ciudadanos a los que deberían servir? La segunda reacción es de irritación, cada vez más profunda. En lugar de ser damas y caballeros al servicio de señoras y señores parecen una mafia que nos tienen esclavizados.
Es imprescindible una regeneración política, impulsada en primer lugar, desde las bases de los partidos, para cortar el trozo gangrenado y poder salvar el cuerpo. Ayer un cargo del PP en el país Vasco declaraba ante los medios que estaba de acuerdo con la filosofía del partido, pero estaba en total desacuerdo con la implementación de los programas y le repelía la falta de ética de sus dirigentes. Por desgracia dimitió, en lugar de luchar desde dentro tratando de mantener lo bueno y eliminar lo malo.
Es tiempo de dejar de hablar y actuar.
La confianza de la ciudadanía no se pide, los políticos deben ganársela con el ejemplo. Si la clase política quiere sobrevivir en democracia, debe democratizar realmente los partidos, deshacerse de los dirigentes corruptos, legislar para cambiar la ley de financiación de partidos y la ley electoral y dotar de medios a la justicia para que pueda actuar libre y rápidamente. Los políticos que se elijan deben dejar de marear la perdiz, cambiar las leyes y hacer que se apliquen y las cumplan todos por igual.
Sólo cuando la ciudadanía perciba y sienta este verdadero cambio, se estará en el buen camino para que la sociedad abrace los buenos valores éticos y entre todos podamos construir un futuro mejor.
©JAS 2013